Podemos resolverlo: Los 10 principios de la sociedad civil para la resolución de la deuda soberana

Ahora existe un amplio consenso en las comunidades financieras y de desarrollo internacionales de que está creciendo una nueva ola de crisis de deuda

La deuda mundial está alcanzando nuevos picos en todo el mundo. Los países de ingreso medio están experimentando niveles de deuda no vistos desde la 'década de desarrollo perdida'.  Mientras que UNCTAD considera que la sostenibilidad de la deuda en los países en desarrollo sufre un "rápido deterioro". Desde agosto de 2019,  el FMI estima que el 47% de los países de ingreso bajo están actualmente en alto riesgo o en crisis de deuda.

Frente a este clima deteriorado las debilidades persistentes del inadecuado, desordenado, opaco e inequitativo régimen actual están cada vez más expuestas.

Tal como está, no existe un proceso sistemático en virtud del cual se lleven a cabo reestructuraciones de la deuda soberana ni posibilidad de que un país reestructure todo su stock de deuda en un solo lugar y en un procedimiento global. No existe un código de quiebra para que los países cumplan legalmente su deuda y sólo pueden asegurar el alivio de la deuda con el acuerdo voluntario de sus acreedores.

En cambio, los países endeudados están sujetos a un régimen no establecido, caracterizado por operaciones ad hoc que han evolucionado a través de pruebas de ensayo y error y que están impulsadas por las necesidades e intereses de los acreedores y repartidas por un ámbito fragmentado de foros informales y opacos de acreedores. Con demasiada frecuencia, esto ha provocado prolongadas situaciones de endeudamiento soberano, caracterizadas por reestructuraciones en serie, por las cuales las poblaciones han pagado un alto precio por derechos humanos erosionados y desarrollo estancado.

Las deficiencias de este 'régimen no establecido' se intensifican en el marco de las nuevas dinámicas de la deuda soberana: del surgimiento de nuevos prestamistas comerciales bilaterales y no tradicionales; al creciente uso de bonos, préstamos garantizados y financiamiento privado apalancado del desarrollo; y en particular la amenaza de litigios agresivos por parte de fondos buitre.  Y subrayan tajantemente por qué la necesidad de un marco multilateral de reestructuración de la deuda soberana ya no puede ser ignorada de manera creíble.

Son cada vez más indispensables renovados esfuerzos internacionales para desarrollar y acordar tal mecanismo. Para estimular e informar estos esfuerzos, Eurodad junto con 33 OSC socias, que juntas representan a más de 1.500 organizaciones, reiteramos 10 principios clave que consideramos esenciales para el funcionamiento de cualquier marco que realmente pretenda anular las deficiencias del actual ‘régimen no establecido,’ y que garantice un enfoque sistemático y pertinente para la resolución ordenada, justa, transparente y durable de la crisis de la deuda soberana.


Multimedia

10 pasos para una resolución más justa de la deuda (infografía)

#Debtworkout por la sociedad civil (inglés)